jueves, 24 de julio de 2008

AVANZADILLA DE LOS CHINOS KUDEIROS TOMA EL ALTO DE ABANTOS

Habiámos estudiado el terreno previamente. Esto sumado a antiguas expediciones realizadas a la zona nos colocaba en una situación privilegiada para hacer esta conquista. El día de autos llegamos a la zona con un objetivo en nuestras mentes: alcanzar el alto de Abantos ( El Escorial ) y hacernos fuerte allí arriba. No era una tarea facil, porque el que ha subido Abantos alguna vez sabe que tiene 2 kms finales de morirse y eso es lo que haces, te mueres en la bicicleta para coronarlo. Me levanté temprano a las 4:30, no pegué ni ojo, para recoger al Funy a eso de las 6:00. A buscar una gasolinera de guardia, porque iba en reserva. Hubo suerte y encontré una en Parla abierta a esas horas. Al terminar mensaje al Funy: voy para allá. Era más pronto de la hora acordada pero mi maestro esprintó y llegó al poco. Cargamos la bici y tranquilamnete llegamos con nuestras monturas, hasta la rotonda de entrada al Escorial, donde tenemos nuestro sitio habitual de comienzo de ruta. Bajamos las bicis y comienza el ritual de vestirnos. Me sentía como un torero antes de salir a la plaza, y esta iba a ser una gran faena. Salimos y al principio hay un pequeño tramo hasta coger el desvío hacia el Monte Abantos, de carretera y cuesta arriba. Ya se te calientan las piernas, pero al final se agradece. Cogemos el desvío y empieza lo bueno: zona de pinares con rampas interesantes. Ahí teneis una foto.


Una zona preciosa donde en ocasiones s epuede ver el monaterio del El Escorial a la izquierda.

La verdad es que no pudimos evitar hacernos la foto de rigor para que las vieran nuestros amigos.


Bueno seguimos subiendo las primeras rampas, donde encuentras una zona sin arboleda y tras superarla a pocos kms encontramos el cruce de subida hacia abantos del que podeis ver algunas imágenes:


" Bueno vale ya de fotos ". Que te estás psando.

Seguíamos subiendo, subiendo, subiendo, ...... El funy parece una maquinaria de relojería, marcando un ritmo comstante. Yo sin embargo, con cambio de ritmo, que si una parada para la foto, que si se me ha hecho una arruga en el calcetín y me hace herida. En fin cosas gajes del oficio. Pero es una gozada encontrarse en plena naturaleza y poder ver venados, jabalíes, águilas, buitres. De todo menos homo sapiens que de sapiens a veces tienen bien poco, en fin que una gozada que os recomiendo. Y sobre todo los olores. eso, de momento no os lo puedo poner en el blog. Así que si quieres oler lo que nosotros no tendrás más remedio que ir hasta allí y disfrutar de la experiencia.
Continuamos las subida y vimos unos compañeros al fondo y el Funy a gritos, "esperadme". Me recordó por un momento a Castela ( que pena Castela te lo has perdido. ¡ Bueno otra vez será!). Casi los cogimos, porque nosotros giramos a la derecha para encarar Abantos y ellos más listos o "más tontos" giraron a la izquierda no sin saludarnos y desearnos buena suerte, a lo que correspondimos como nos enseñaron en el colegio de pago donde nos educaron. (bueno vale "había un colegio de pago al lado del nuestro"). Llegamos al tramo conflictivo y el Funy me dice que arreé, que yo tengo que subirlo a tope. "Con lo bien que yo iba". Ahí vamos y lo subí bien, mejor que el año pasado y aún tuve tiempo de hacer el cara opr el monte y de tomar una fotos a mis maestro cuando llegaba a las rampas finales.




Y una fotos con las burras y al fondo un embalse:

Y por fin arriba una foto en el alto de recuerdo.

Y después de coronar el alto, sólo nos quedaba, bajar hasta Peguerinos: café y agua (sólo café y agua) y tras descansar un poco dirección al Escorial. Todavía nos quedaba por subir Santa María de la Alameda y Robledondo, que no son moco de pavo, pero duro con ellos. La subida a Robledondo también fué Tramo Libre para mí. en fin toda una expeirencia que finalizó con la bajada del Puerto de la Cruz Verde y llegada a El Escorial, hasta el coche donde cargamos las bicicletas, para regresar a casa previo paso a tomar el aperitivo a casa del chache de Funy, que como siempre se portó.



Ha sido una vez más una experiencia inolvidable, junto a mi maestro y amigo. echamos de menos a otros chinos kudeiros, pero que se le va a hacer. Salu2 y hasta pronto